domingo, 11 de noviembre de 2007

Little Red Riding Hood


-¿Qué haces?

-Ver porno ¿y tú?

-Pensaba en ti...- confesó sujetando el escaso sonrojo que aún no se había escapado y propagado por su rostro, con miedo a que el bucle telefónico fuera capaz de transmitírselo.

-Nunca te rindes ¿verdad? – la voz, resacosa pero firme, conservaba cierto tinte infantil, de cuento de tapas duras; un tinte que, a pesar de haber sobrepasado hace tiempo la frontera de los veinticinco, se resistía a marcharse- Me voy a desayunar –anunció despreocupadamente y, de un acrobático salto, abandonó la cama y a su interlocutor, que de golpe se vio en brazos de la ausente compañía del silencio.A medio camino entre el dormitorio y la cocina Laura se paró en seco: parecía haberse arrepentido de su maleducado gesto y con una sonrisa en armonioso compás con la chispa pecaminosa de sus ojos, retrocedió sus pasos. Comprobó que la respiración entrecortada seguía escuchándose al otro lado y, con un par de ágiles movimientos de muñeca, subió el volumen de la tele y acercó el auricular al altavoz, dejando que un mar de gemidos y música de ascensor inundaran la línea.

Los supervivientes de la nevera eran ya escasos y todos, salvo una de las latas de cerveza checa, respiraron tranquilos al ver desaparecer la mano de la chica. Estaba acostumbrada a estrambóticos desayunos y cuando sus ojos se fijaron en el trocito de tarta de chocolate de la encimera, supo que ya había completado el de aquella mañana.


Con una esperanza frágil como una torre de naipes, Eduardo esperaba que ella volviese y que, con su voz de gominola, le dijera que solo había sido una broma; la conocía, sabía que no iba a ser así y se maldijo así mismo por llevar tanto tiempo encarcelado en sus redes. Los minutos pasaron y terminó por aceptarlo con resignación, como tantas otras veces había hecho, colgando con lentitud el teléfono. Llevaba tanto tiempo trabajando en el turno de noche que ya ni se acordaba; normalmente al llegar a casa el sueño ya le esperaba sentado al borde de la cama pero, al no encontrarlo aquella mañana, marcó como un autómata las nueve cifras. Con un nubarrón descargando sobre su cabeza, se enfundó en su abrigo más resistente y salió a perderse por las hojas del otoño.

-Buenos días, Lobo – la vecina, sentada en un poyete de piedra, limpiaba unos sombrerillos* del tamaño de puños que había recogido con los primeros rayos de sol- que raro verte a estas horas... ¿alergia a las sábanas? ¡Ay, chiquillo! Cuanto daño te va a hacer el no dormir...

Eduardo. Todas y cada una de las sílabas de su nombre se le hacían extrañas. La tradición y el gusto por el sobrenombre aguantaban impasibles el paso del tiempo y a Eduardo se le conocía como el Lobo desde muy corta edad. El Lobo, solitario y noble, con carácter, serenidad y fuerza. Se limitó a sonreír con amabilidad y a corresponder el saludo con un leve movimiento de cabeza.

Siguió caminando,en dirección a las afueras.

Lo que el Lobo vio al llegar allí le enervó la sangre: Pedro, el guardabosques volvía a las andadas. No iba solo. Junto a él otros dos hombres, los conocía de vista. Dejaron unas cuantas botellas en el maletero del todoterreno y dieron la vuelta a la gasolinera. Dejando sobre sus cabezas un cartel de neón rosa, entraron en una casa blanca sin ventanas, donde se divertirían a costa de unas cuantas jóvenes ligeritas de ropa. Se acordó de Laura y el nubarrón de su cabeza se convirtió en una furiosa tormenta. Dejó que entraran al antro y asegurándose de que nadie le observaba, forzó la puerta del coche. Tiempos oscuros de alocada juventud le habían enseñado y todavía recordaba como hacerlo: no tardó más de dos minutos en oír el rugido del motor.

Mensaje recibido. Laura contemplaba su cuerpo desnudo en el espejo del salón. Su blanca piel resplandecía en mitad de la sala, y la redondez y firmeza de su pecho engañaban a sus ojos que parecían ver dos perfectas lunas. Pedro había devuelto una renovada vida a su piel, rebosante de calidez y deseo. El juego que le proponía le resultó morbosamente atrayente y lo siguió al pie de la letra, tal como se lo había sugerido en el mensaje de móvil: se vendó los ojos, entornó la puerta de entrada y esperó impaciente, sentada en el reposabrazos del sofá.


La potencia del coche le hacía subir campo a través sin ningún problema, hubiera llegado antes por carretera pero si conducía por la comarcal existía un riesgo mayor de que le descubrieran.Ya se veía el pantano cuando los ojos del Lobo se iluminaron: Pedro se había dejado el móvil en la guantera. Un arma nueva para su manos vengativas, el automóvil se sumergiría en lo más profundo de las verdes aguas en otro momento. Sus dedos corrieron a la agenda del teléfono y en cuanto el nombre de Laura apareció en la pantalla el Lobo se relamió de gusto, siendo consciente de que había encontrado el perfecto uso para el aparato. Mensaje enviado...

Laura escuchó el chirriar de la puerta, pasos lentos que se acercaban, dedos que lentamente le acariciaban la espalda...Mientras las manos surcaban lentamente el cuerpo de Laura, recreándose tras la frontera de su espalda, el nubarrón desaparecía de la mente del Lobo...

-Al fin te tengo solo para mi, caperucita...




No sé si en otros lugares existen o si se les da otro nombre (si alguien los llama así y no es de la Mancha que me lo diga, que tengo curiosidad) pero por si lo preguntáis...los sombrerillos son unas setas típicas de la Alcarria...En realidad es una parte por un todo, ya que el sombrerillo es según el diccionario la parte abonbada de la seta, lo que podríamos llamar sombrilla...



22 comentarios:

Indi dijo...

Lo del título...¡¡a mi que me registren!! soy una nulidad jamia. Ayer escuchaba unos temas de Jean Michel Jarre y me di cuenta de que esto debe ser genético, en algunos especímenes, porque el tío con "Revolution" Y "Rendez Vous" lleva 30 años titulando canciones. Lo mismo que Oldfield con "Tubular Bells". Así que en eso no te puedo ayudar;).

Me ha gustado esta versión de Caperucita, un poquito erótica, un poquito provocadora, muy sugerente.

Anda que no están buenos los "sombrerillos", y los Lobos, los Lobos también están muy buenos ;))

Besossss

Lucía dijo...

A mí me ha parecido muy inquietante ...

Y con lo del título tampoco me atrevo, no tengo imaginación.

El mundo de Yas (Andrés) dijo...

Puesss....
Caperucita....

Me parece un buen titulo... ya que desde luego no das muchas pistas en el texto....

Te lo has currado... asi que no te nomino... jejejeje....

Besos burbujianos.
Yasi.

Klover dijo...

Lo del título ya está solucionado :)

¡feliz lunes!

Anónimo dijo...

¡feliz lunes!

Buen texto, me gustó el suspense desde Lobo cuelga hasta que llega a la casa, aunque aún no sé qué hizo con el móvil, eso no lo entendí muy bien.

Me encantó el detalle de los habitantes de la nevera temblorosos!!! jejeje

Un abrazo,

Synn

JT dijo...

Buenísima venganza, jeje.
El desarrollo semipolicíaco del relato te ha quedado genial, y la vulnerabilidad del chico trasformándose en una posición de fuerza...

Coincido con Synn en lo de la nevera. Esa forma de describir su contenido da mucha más fuerza al personaje de la chica. Segura de sí misma, avasalladora... que al final se convierte en indefensa ingenuidad.

¡Uta nene!

PD: Grábalo, jooo....

Luz de Luna dijo...

Siiiii grabaló, me gusta tu versión vanguardista del Caperucita jaja ...

Besitos.

p.d. Que ricas las setas....

Anónimo dijo...

Jolines niña... Me ha gustado mucho, y como venganza no tiene precio...

A mí me ha gustado mucho... Ella que se creía tan dura, tan ganadora y al final ella es la presa...

Besines de todos los sabores y abrazos de todos los colores.

Indi dijo...

muy bueno el título ;)) Sigo dándole vueltas a lo de convertirse en pedrusco...lo veo algo así como esas joyas malditas que tienen un "genio" dentro, que suele ser un Djin muy pero que muy malo.
-Toma, jamia, te regalo este anillo que es herencia de familia, contiene ´los espíritus de todas las suegras de las últimas 14 generaciones de nuestra familia...

Yo creo que algo como eso sería motivo suficiente para que se desencadenase el apocalipsis..no, no, mejor ser arbusto, que como mucho se te puede mear un perro. ;)))

Carabiru dijo...

Rebueno chica!
Genial, con esos cambios en los personajes, que además quedan perfectamente descritos sin apenas decir nada.

Mi más sincero aplauso chica de las cartas!!

Si consigues una forma fácil de explicármelo, guay, sino ya me buscaré la vida por los mundos de dios!

Anónimo dijo...

Como disfruto imaginando la cara del... de Pedro al salir bajo aquel letrero de neón. Lo mejor que le podía pasar en esta ocasión a Little red era que apareciera el lobo.
Ingeniosa trama la que ideas para con la frase y que logras llevar magníficamente a cabo en una narración mezcla de géneros. Con apenas unas palabras nos llevas de un escenario a otro creando espacio, movimiento, tensión, desde la luz de neón hasta la luz del interior de una nevera que no logra enfriar la pasión del final!
Genial.
Un abrazo enorme!

wannea dijo...

ains, pero vamos a ver... que yo me aclare.... eduardo esta por laura, pero laura esta por pedro, pedro se va de putas y eduardo queda con laura haciendose pasar por pedro no? y a todo esto cuando laura se da cuenta de que su pedro en realidad es eduardo que hace??? ains, madre, demasiado pensar pa un lunes jajajajajaja pero si, la verdad es que la trama engancha (cuando conseguí separar los personajes...)

PD: no tengo ni idea de los sombrerillos, pero si, me imaginaba que eran setas muak!

Miriam dijo...

:O

Así me has dejado!

Ha habido momentos en los que me he perdido un poco con pedro, Eduardo y el lobo, pero me ha parecido buenisimo el relato!

Esta caperucita...

Y pobre Laura, jaja, siempre acaba siendo la prota :P

Un besote fuerte!

Indi dijo...

Eso es que has nacido en un día de esos, uno "fronterizo", pero ni caso, más bonito Acuario, donde va a parar...mis 3 últimas jefas han sido acuario, mi perra es acuario...me gustan¡¡¡¡¡¡¡¡¡. No, yo soy géminis, por la grasia de dio (por la gracia que me ha hecho el jodío).
Ya te dije que no se equivocaba: Contagioso o mucho más contagioso ¿no ves como sonrío???????

Espero impaciente tu próximo gazapo jajajaj ;)

Besos.

Laura Luna dijo...

Una gran revisión del cuento de Caperucita, muy bien adaptado al siglo XXI. Me han encantado todos los personajes; resultan creíbles, tienen personalidad y escapan de los arquetipos a los que nos acostumbran los cuentos. La descripción de los alimentos de la nevera y la del cuerpo desnudo de Laura me han gustado especialmente :)

Muchos besitos, guapísima, a ver si hablamos pronto<3

Mun

PD: Tras el punto seguido o punto final, siempre se deja un espacio en blanco ;) Es un detalle ortotipográfico sólo, pero es para hacértelo saber ;)

Darka Treake dijo...

Hola Klover!!

menudo relato... me ha gustado mucho, admito que al final...buuuuffff estaba...
pero al principio me liaba un poco, con quién llamaba o quién era quién...
da igual, me ha gustado.


oye, que yo creo que sí que me acosas, ajajaja
qué bueno ha sido eso.
Lo de neuro... la verdad es que me apetecía desde hacía tiempo, y así me sirve para repasar.
Pensé en empezar con algo de lenguaje porque me gusta mucho, y me acordé de ti, pensé que te gustaría.
pronto, pronto!!


Ah!! y lo del miniconcurso... cuando tu quieras, siempre estarás a tiempo!!

1bsitooooooooo
Darka.

Pedro dijo...

Pues me ha gustado mucho tanto tu narrativa (lo que no es ninguna novedad) como el juego que hacees entre el título y los personajes. ADemñas los personajes consigues que resulten muy cercanos con muy pocas palabras (lo del frigorífico, la explicación del apodo de Eduardo...) . En definitiva muy bueno.

Un abrazo,


Pedro.

Popi dijo...

Es la segunda vez que paso., pero ahora ya sé qué decirte. Que... tú no necesitas "plagiar" cuentos pues tienes suficiente talento, imaginación e inteligencia como para inventártelos! Eso déjalo para la disney. Al final me odiarás, sino lo haces ya, pero es que yo quiero leer a Klover!
Un beso guapa.
:)

Anónimo dijo...

Yo me paso casi con la frase siguiente sin acabar de leer las frases de esta semana.
Me ha gustado mucho cómo la has desarrollado!!
¡un besote de fresas!

Polux dijo...

eressólomíalittleredriddinghood...

caperusa.


salud!

Indi dijo...

¡Pa ke cohjone me habré cortado flekillooooooo!! snif, lo odio. A la mañana siguiente lo odio jajajaja. Bueno, ya crecerá, paciencia.
No me canso de leerte, ¿ves? de lo que me gusta no me canso, del resto no me hago responsable. Por naturaleza, tengo el grado de atención de un niño de primaria, que suele ser no más de dos minutos, pero me parto con tus comentarios.

Eres un amor, lo dijo Sturm, dijo: Klover es un amor. Lo secundo.

¿Has vivido en castellón? ¿cuando? ¿donde? y sobre todo ¿porque no te he visto nunca? vamos a ver ;).
Yo habito en la capital desde los 8 años, así que lo de "mi pueblo" es testimonial. Sobre todo porque si tuviera un pueblo ya lo habría vendido ;) para gastármelo todo en una juerga monumental.
Que no lo descartes, estás invitada ;)).

Besosssssssssss

tormenta dijo...

cuajadito de metáforas, y con un toque desenfocado al tratar la historia... de verdad, lo tuyo es fuerte :) me encanta como escribes, y no me perdono haberte dejado para el final.
te lo aseguro, al final he aplaudido y todo XD
de un plumazo te has convertido en una de mis favoritas.
muchos besetes, a ver si organizamos algo en condiciones para vernos en madrid.
un beso guapa!